Vivir la ruta del mosto sin salir de la ciudad

Fin de semana y los desplazamientos hasta el Aljarafe se multiplican, y más en estas fechas. El mosto es el principal reclamo que lleva a los urbanitas a trasladarse a Umbrete o Villanueva del Ariscal, entre otras localidades, que guardan en sus bodegas este típico caldo del otoño. Pero ahora, beberlo se hará más cómodo. Ya no habrá que coger el coche para su consumo gracias a la I Ruta del Mosto de Sevilla. Un total de 40 empresas, entre ellas 34 bares y restaurantes, dos tiendas gourmet y dos bodegas del Aljarafe y la Sierra Norte se han unido para crear esta ruta, con el objetivo de recuperar en la capital hispalense la tradición de consumir los vinos jóvenes que se producen en la provincia. Sin olvidar a los pueblos, la ruta también se extiende a cinco localidades.
La ruta, que está impulsada por la distribuidora especializada en vinos Viandalucía, del Grupo Elam, atraviesa buena parte de la capital hispalense: el Centro, Triana, Sevilla Este o Los Bermejales. En estos establecimientos se pueden encontrar dos caldos recién elaborados en sendas bodegas artesanales, La Margarita, situada en Constantina, y la bodega Loreto, en Espartinas.
La costumbre de beber mosto está muy arraigada en los municipios productores de vino de la provincia, pero se ha ido perdiendo en la capital hispalense, donde es prácticamente imposible encontrar un lugar donde degustarlos, explica el responsable de Viandalucía, José Montero. Por ello, se ha optado por impulsarla de nuevo utilizando para ello «dos caldos de gran calidad y bien diferentes, el mosto de Constantina y el de Espartinas». «Todos coincidimos en que hay que dar a conocer los caldos de Andalucía, que son unos grandes desconocidos», afirma, añadiendo que el mosto tiene, además, un atractivo turístico por ser un producto «tradicional, artesanal y característico de esta zona».
En la ruta se puede tomar dos tipos de mosto. El vino de Constantina tiene el tono rosáceo que le otorgan las uvas de las que se nutre, la garnacha tintorera y la cayetana, que le confieren además un olor y un sabor afrutado. En cuanto al mosto de Espartinas es de tono dorado, se elabora con la uva garrido fina, propia del Aljarafe, y tiene un olor y un sabor afrutado característico.
En cuanto al tipo de establecimiento en el que se pueden degustar estos caldos, son diversos, desde una típica abacería hasta restaurantes de la llamada cocina de autor. Ambos utilizan los mismos ingredientes, los de la cocina mediterránea, que hacen un buen maridaje con estos vinos.
Así, en la capital, la I Ruta del Mosto de Sevilla está compuesta por 29 establecimientos. Los bares son Las Golondrinas I y II y Lirondo, ambos en el barrio de Triana; mientras que en el Centro se pueden visitar la Abacería de San Lorenzo, Puerta Catedral, Arenero Taller de Tapas, La Buena Vida, La Ilustre Víctima, Alarife, El Pimiento, Romera y Romero, Arte y Solera, Extraverde y Bar Cristina. En Nervión se encuentran el Tradevo Gastro-Bar; en Miraflores el CaPaTapas; en los Bermejales La Tasca del Pintor; en Sevilla Este la Taberna Mayoral, El Almirez, Nuevo Aire Bar, El Aperitivo y La Tasca de Pepa. Asimismo, se puede encontrar mosto por primera vez en restaurantes como Barajas-20, Contenedor, Lumbreras, La Jarana, Al Solito Posto y Casa Salva, así como en dos tiendas gourmet, La Casa de los Quesos, en Sevilla capital, y Basilippo, en El Viso.
La ruta se extiende a Mairena con la Bodega La Selecta, a la localidad de Alcalá de Guadaíra con La Abuela Lola y a El Viso con el Más que Tapas y la venta San Román. Además, el mosto llega a Carmona con La Yedra y a Dos Hermanas con La Mandrágora y Gaastra.
No deja de resultar peculiar que en bares como La Ilustre Víctima, en cuya carta puede apreciarse una «cocina alternativa, con platos internacionales», afirma el gerente Enrique Gallego, puedan degustarse estos tradicionales vinos. «Desde pequeño he vivido la tradición del mosto. Ahora conjugamos las dos cosas, la cocina actual con el típico mosto». La copa a 1,20 euros, eso sí, acompañada de «unas aceitunitas de la tierra».
Barajas-20, gastrobar de «cocina tradicional mediterránea adaptada a los nuevos tiempos», describe su propietario, Miguel Benjumea, es conocido, entre otros motivos culinarios, porque cada semana «tenemos diferentes vinos de Andalucía». A esta oferta, ahora se suma la del mosto, que estará hasta que finalice la época del mismo, hasta principios de año. Aquí, la copa cuesta 1 euro «para incitar a que la gente lo pruebe», concluye Benjumea.
En la Plaza de Doña Elvira se encuentra Extraverde, tienda-bar especializada en aceite y en productos andaluces. Aquí, se puede tomar una copa (1,50 euros) o comprar una botella (4 euros). En los dos años y medio que lleva abierta, es la primera vez que tienen mosto. «Estamos en una zona turística, así que los guiris también tendrán la oportunidad de conocer este tipo de vino».